Malas noticias para el agua pública
-y para el movimiento en
su defensa-
Por: Doris Gutierrez
El 3 de Diciembre
de 2014 se
dio un paso de gigante hacia la privatización del agua de Madrid. En la
reunión del Consejo de Dirección que tuvo lugar ese día, se aprobó
emitir bonos por valor de 500 millones de euros, ampliables a 1.000 en
una posible segunda fase. Si serán
500 o 1.000, o lo que quieran, o si
serán convertibles o no en acciones, lo decidirá unos hombres del PP
que, a partir de ahora, cobrará 600 euros cada vez que se sienten a
decidirlo. Por otro lado, el mismo día 3, también se decidió ahondar en
la ruina programada de la empresa, repartiendo dividendos por valor de
131 millones de euros entre la Comunidad de Madrid y los Ayuntamientos.
Aquellos que votaron en contra de las 'propuestas del PP', dos del PSOE
y dos de IU, siguiendo con la estrategia de presión que les concede la
mayoría absoluta, seguramente no recibirán su parte líquida.
Desde la Plataforma en Contra
de la Privatización del Canal de Isabel II y el 15M , ya con las fuerzas
bastante mermadas, lanzamos una llamada de alerta ante el peligro que
suponía esta operación y la poca transparencia que había caracterizado
al proceso. Peligro porque si esos bonos fueran convertibles en acciones
ya la privatización sería efectiva. Y poco transparente, porque además
de que es una maniobra privatizadora encubierta, no se facilitó ningún
tipo de información a nadie hasta la víspera de la reunión.
Dirigimos la campaña a los
medios de comunicación y a la movilización ciudadana. El día 30, unas
400 personas en la Puerta del Sol expresaban su rechazo, una vez más, a
la privatización de la gestión del agua de Madrid. El 3 de Diciembre,
día laborable y por la mañana, unas 300 personas de unos cincuenta años
de media, se congregaban, cantando canciones de protesta, a las puertas
del Canal de Isabel II. (ahora Canal Gestión S.A)
Y claro que se calentó. Los
guardias empezaron identificando a las primeras personas que llegaron, a
pesar de que la concentración estaba comunicada a Delegación de
Gobierno. Y cerca de las 12.50, 10 minutos antes de que empezara la
reunión, arrestaron a un chaval. Un trabajador del Canal. Uno de los
pocos jóvenes, entre tanto mayor. El único al que se podía arrestar. Se
le llevaron y después de unas horas, a las 7 de la tarde, le dejaron en
libertad con cargos: resistencia a la autoridad y agresiones.
Paralelamente, el día 3, un
grupo de personas colocaba una pancarta entre dos semáforos, para
visibilizar esa privatización encubierta del Canal. La pancarta decía
'Nos privatizan el agua. Disculpen las molestias'. Y las personas que
estaban allí dadas de la mano, gritaban 'el agua no se vende, se
defiende' y 'el agua es un derecho y no una mercancía'. En seguida
llegaba un guardia y, previa identificación de tres personas disolvía la
acción.
Veremos en qué se traducen
esas identificaciones y ese proceso ya abierto. Mientras tanto seguimos
nuestro camino. Promocionando nuestro libro 'Más claro agua', editado
por Traficantes de Sueños. Dando charlas, explicando lo que están
haciendo con el Canal de Isabel II, allá hasta donde lleguemos.
Promocionando también entre todo el mundo, asociaciones, colectivos,
coaliciones ciudadanas y partidos políticos, nuestra
Propuesta de acuerdo por la gestión pública del agua en Madrid,
para que esto que estamos viviendo no se vuelva a repetir. Para que,
entre todas, podamos gestionar el agua como si fuera nuestro bien común
más preciado. Para que sentemos las bases de una gestión participativa
del agua de Madrid. Seguiremos diciendo que el agua es un Derecho
Humano, porque así lo considera Naciones Unidas y la Comisión Europea,
gracias a la presión ciudadana organizada a nivel europeo.
Y ya veremos cómo hacemos
todo eso, sin morir en el intento, ahora que nuestras fuerzas se han
mermado aún más. Cuando hoy, 6 de diciembre, ha muerto nuestro compañero
Ladislao Martínez. Era un hombre con tesón. Y la lucha por el agua
pública habría sido y será otra sin él. Echaremos de menos su
constancia. Y su humanidad. Desde aquí le despedimos repitiendo las
palabras de Ecologistas en Acción: 'que la tierra te sea leve,
compañero'.
¡ANTES
DE QUE LES ECHEMOS NOS QUIEREN ROBAR EL CANAL!